Un granjero finlandés convencido de que comer grillos ayuda a mitigar el cambio climático

Un día, Roope Päivänen decidió dejar su casa de Helsinki y su trabajo de director de cine y emprender una nueva vida en el campo, dedicado a la cría de grillos (sí, eso existe). Entra en nuestro vídeo y conocerás su granja en Finlandia.

Quién no se ha planteado alguna vez la idea de empezar de nuevo. Roope Päivänen y su mujer llevaban ya mucho tiempo queriendo dejar atrás su agitada vida en la ciudad.

En 2018, Päivänen vio que un colega estaba editando una película sobre grillos. Luego, surgió la oportunidad de poner en marcha una granja de grillos en Karjaa, una pequeña ciudad del sur de Finlandia, a medio camino entre Helsinki y Turku, oportunidad que él aceptó sin dudarlo.

“Criar grillos es una buena idea”, afirma. “Se trata de uno de los alimentos y de las industrias del futuro”.

Päivänen suele criar varios millones de insectos a la vez en cajas de plástico, las cuales están dispuestas en hileras en una sala climatizada, cuyas estanterías albergan 300 recipientes. El ciclo de vida de los grillos suele ser de entre 35 y 45 días y son alimentados con una mezcla fermentada a base del grano ya utilizado de una fábrica de cerveza local y los restos de verduras de los supermercados. 

Cocinar grillos es una acción climática

Entra en el vídeo para conocer los platos a base de grillos que prepara Roope y descubrir cómo es su vida de granjero.Vídeo: Erika Benke/ThisisFINLAND.fi

Naturalmente, Roope Päivänen se ha propuesto la misión de ganarse a la gente e introducirla en el consumo de grillos. Está convencido de que reducir la carne roja, tan presente en nuestros platos, y sustituirla por insectos, es una parte importante de la lucha contra el cambio climático.

El granjero no duda en admitir la dificultad que supone convencer a los consumidores para que elijan alimentarse a base de grillos, pero opina que existe una solución: que estos no se vean en el plato.

“Tenemos que ser más creativos y preparar con ellos comidas de verdad, en lugar de solo freírlos enteros y servirlos de aperitivo”, dice.

“Yo preparo kebabs, lasaña y hamburguesas de grillos. A todos los hijos de mis amigos les encantan”. Esto es buena señal, ya que los críos suelen ser bastante quisquillosos a la hora de comer.

Por Erika Benke, octubre de 2022