Un grupo de críos entusiasmados se interna en el bosque cercano a su guardería en Helsinki. Están familiarizados con su zona de juegos dentro del bosque y trepan con agilidad por las grandes rocas y los troncos de los árboles.
Susanna Suutarla, directora general de las guarderías Taiga Child, nos explica la rutina de este centro orientado a la naturaleza:
«Para nosotros la naturaleza es similar a los espacios interiores y disfrutamos del aire libre durante todo el año, llueva o truene. Pasamos muchas horas en el bosque todos los días, y a menudo incluso comemos fuera».
«Taiga Child nació hace 20 años. Colaboramos con Suomen Latu, la Asociación Finlandesa para Deportes Recreativos y Actividades al Aire Libre, en el desarollo de un concepto llamado Luonnossa kotonaan, que vendría a ser “en la naturaleza como en casa”, el cual hace hincapié en la importancia de jugar y moverse con seguridad en la naturaleza, y en compartir el tiempo y hacer cosas juntos, todo ello sin prisa alguna».
Foto: Roope PermantoLos niños aprenden a valerse de sus cuerpos al aire libre y también a andar y moverse por terrenos irregulares. El entorno natural alimenta la imaginación del niño, que a su vez, si es curioso, observa y aprende de todo aquello que lo rodea a través de los juegos.
«En el bosque, los críos aprenden de manera muy concreta a diferenciar un abeto de un abedul y a cuidar el medioambiente. Nadie dejaría una sala de juegos desordenada después de haber jugado en ella, y lo mismo vale cuando se juega en una zona al aire libre. Apreciamos los valores de un estilo de vida sostenible», concluye Susanna Suutarla.
Por Marina Ahlberg, ThisisFINLAND Magazine 2019