¿Y si este artículo te gusta tanto como para enviarles el enlace a tus amigos? En ese caso, al leer tu mensaje, estarían utilizando los mismos servicios de los que se habla en esta historia: los centros de datos localizados en Finlandia.
Los centros de datos son instalaciones que albergan enormes cantidades de equipos informáticos, de redes y de almacenamiento de datos. Pueden alimentar sitios web, hacer funcionar correo electrónico, proveer almacenamiento en la nube o posibilitar el comercio electrónico. Aunque podría tratarse de algo tan simple como una sala repleta de servidores, a menudo, cuando se habla de ellos, nos referimos a edificios a escala industrial que están dedicados exclusivamente a este tipo de servicios.
Y, al parecer, Finlandia es un lugar excelente para los centros de datos.
El frío le sienta bien a la computación
Ari Kurvi es el director del centro de datos de Yandex en Mäntsälä, a unos 60 kilómetros al norte de Helsinki. Yandex, a menudo llamada “el Google de Rusia”, es una empresa multinacional especializada en servicios online para usuarios. Tiene seis centros de datos en Rusia y uno en Finlandia, este último en funcionamiento desde 2015.
«Finlandia es un buen lugar para un centro de datos, dada su estabilidad socioeconómica y gubernamental», afirma Kurvi. «Los costes de energía y la fiabilidad son excelentes. Además, Finlandia posee una fuerza laboral bien formada y hay buenos canales de comunicación con las autoridades».
Pero, además, existe otro aspecto beneficioso: su clima. Los ordenadores generan mucho calor, como es sabido, pero la temperatura del aire finlandés, fría durante la mayor parte del año, ayuda a enfriar los centros de datos, lo cual supone un ahorro de dinero y energía, al no ser necesario el aire acondicionado.
Visto de perfil, la inclinación y el borde redondeado del tejado del centro de datos de Yandex le dan al edificio la apariencia de un ala de avión seccionada transversalmente. Precisamente este diseño ayuda a canalizar el aire frío hacia el sistema de ventilación.
Reducir las emisiones recuperando el calor
Aún así, el centro de datos sigue generando una gran cantidad de calor, pero este no se desperdicia, sino que es almacenado y enviado a la planta térmica del distrito de Mäntsälä.
«El calor es un subproductos de los centros de datos», nos explica Ari Kurvi. «Nosotros le vendemos el nuestro a la comunidad, para que no haya que generar energía, evitando así que se libere más CO2 para calentar los hogares. Fuimos el primer centro de datos que utilizó el exceso de calor de este modo, y ahora otros también lo están haciendo».
Según el Fondo de Innovación Finlandés Sitra, el calor residual del centro de datos responde a las necesidades térmicas de Mäntsälä. Sitra estima que si los centros de datos que se han abierto o van a abrirse en los países nórdicos entre 2018 y 2025 recuperasen su calor de esta forma, la reducción en emisiones resultante equivaldría a retirar medio millón de automóviles de la circulación.
A más datos, más energía
Finlandia alberga unos 20 centros de datos de importancia. Las empresas nacionales de telecomunicaciones, como Telia y Elisa, cuentan con algunos, al igual que la multinacional Equinix, especializada en centros de datos, y Ficolo, proveedora de servicios en la nube. Google posee 21 centros de datos en todo el mundo, incluido el de Hamina, una pequeña ciudad de la costa meridional de Finlandia, a unos 150 kilómetros al este de Helsinki. El centro comenzó a funcionar en 2011 y más tarde se ha convertido en la sede de la nube de la compañía para la región norte de Europa.
La base de Google en Hamina es la más grande del país. Mientras que el centro de datos de Yandex utiliza unos 20 megavatios de energía –una cantidad similar a la del centro de Telia–, el de Google necesita cuatro veces más.
«Cuando seleccionamos los sitios para albergar nuestras infraestructuras, buscamos comunidades que tengan los recursos necesarios, es decir, edificios, terrenos, fuerza laboral, oferta de energía y otros recursos, entre los que se incluyen los suministros de energías renovables», nos explica Heidi Jern, de Google Finlandia. «Hamina nos pareció una gran comunidad en un emplazamiento excelente, cuyas infraestructuras ya existentes se correspondía con nuestras necesidades».
Energía eólica y agua de mar
La ubicación de Google responde a un punto de vista sobre la refrigeración diferente al de Yandex en Mäntsälä. El centro de datos de Hamina está en la costa, en una antigua fábrica de papel, y utiliza el agua del mar en el proceso de enfriamiento.
«Hemos logrado reducir el uso de energía gracias a nuestro avanzado sistema de refrigeración, el primero de este tipo en todo el mundo», dice Heidi Jern. «Hamina es el modelo de sostenibilidad y eficiencia energética para todos nuestros centros de datos».
Los centros de datos están sedientos de energía y Google le compra la mayor parte de la que consume a los parques eólicos de Hamina. Los convenios de compra a largo plazo de energía eólica de la empresa suman los 440 megavatios en total, lo cual incluye toda la producción de varios parques eólicos actualmente en funcionamiento o en desarrollo. Se sabe que Google ha contratado el 60 % de la energía del que pronto será el parque eólico más grande de Finlandia. Situado cerca de Kajaani, a unos 500 kilómetros al norte de Helsinki y casi acabado de construir en el momento de redactar el presente artículo, el parque incluirá 41 turbinas con una potencia de 211 megavatios.
La demanda de datos
El mundo se va volviendo cada vez más digital y la demanda de datos no para de crecer. A lo largo de este tiempo muchas compañías finlandesas han ampliado sus centros de datos para mantenerse al día con la demanda, hasta tal punto que Yandex duplicó recientemente su capacidad, mientras que Google ha informado de que sus inversiones acumuladas relacionadas con Hamina ya alcanzan los dos mil millones de euros.
«Mi visión del mundo es en azul y blanco ¾los colores de la bandera de Finlandia¾, así que estoy muy contento de que nuestro centro de datos esté aquí», dice Ari Kurvi, de Yandex. «Y aún nos queda espacio para expandirnos. Espero que la demanda siga aumentando y tengamos que construir más edificios aquí en los próximos años».
Así que ya sabes, un acto tan simple como compartir el enlace a este artículo, hará tal vez que aumente la demanda de centros de datos.
Por David J. Cord, noviembre de 2020