Girl Picture (Tytöt tytöt tytöt, 2022), de la directora Alli Haapasalo es una historia positiva sobre chicas adolescentes de más de 16 años.
«La película es un retrato de lo que significa ser una chica hoy en día», explica Haapasalo. «Yo no la describiría como una película que narra cómo es hacerse mayor de edad, porque no creo que las chicas se conviertan en adultas o alcancen una nueva etapa de desarrollo». Lo que quería resaltar es que todos estamos inacabados y somos imperfectos. Estas chicas exploran su propia identidad sin que nadie las defina desde fuera. Hemos recibido muchos comentarios positivos del público sobre este punto en concreto».
La película ha sido un éxito internacional, especialmente tras ganar el Premio del Público en el Festival de Sundance 2022. Es apta para mayores 12 años.
«No estaba segura de si el filme chocaría con barreras lingüísticas o culturales», dice Haapasalo. «Por suerte, ninguno de esos aspectos ha supuesto un problema para el público internacional. Personas procedentes de diferentes culturas y que hablan diferentes idiomas se han sentido profundamente identificadas con los personajes».
El amor es el amor
Girl Picture pretende cuestionar la percepción tradicional que se tiene de las chicas. En la película, tres chicas pasan tres viernes juntas, y dos de ellas se enamoran entre ellas.
«Se trata de dos personas enamoradas, independientemente de su género», dice Haapasalo. «Su orientación sexual no plantea ningún problema. La tercera chica busca el placer, pero no lo siente. No sabemos si es asexual o simplemente aún no ha encontrado su sexualidad, y no pasa nada por eso. Solo se están explorando, a ellas mismas y su sexualidad. Estas chicas ven la sexualidad como algo que fluye, que no es fijo. Piden permiso para tocarse y respetan el espacio de la otra».
Aunque son jóvenes valientes y activas, no sufren ningún daño por ello.
«Nuestro mundo está lleno de historias de niñas que se quedan embarazadas, son violadas o asesinadas por atreverse a ser libres», afirma Haapasalo. «Las guionistas, Ilona Ahti y Daniela Hakulinen y yo queríamos hacer lo contrario y no castigar a las chicas por su libertad».
Apoyo para los aspirantes a cineasta
Tras estudiar Periodismo, Haapasalo estudió dirección en Helsinki y Nueva York. Vivió diez años en Estados Unidos y disfrutó de su estancia en el extranjero.
«Volví a Finlandia con mi familia, y he estado disfrutando de la cómoda y funcional sociedad finlandesa y de su bien organizado sistema de guarderías», comenta. «Mi día a día es logísticamente muy sencillo y es fácil viajar de un sitio a otro. Por ejemplo, no vivo cerca del aeropuerto, pero puedo llegar a él en 20 minutos».
Para el desarrollo de sus proyectos cinematográficos, Haapasalo ha encontrado apoyo y financiación en la Fundación Finlandesa del Cine.
«Cuando quieres hacer películas, ya no hace falta ser rica y financiar tus propios proyectos, ni tener buenos contactos para hablar con la gente adecuada», dice. Cree que esto aumenta el acceso a la industria cinematográfica y contribuye a una mayor diversidad social, étnica y de género. «Supone una gran diferencia contar con dinero público para apoyar el cine».
Las productoras cinematográficas internacionales pueden solicitar un reembolso en metálico a Business Finland por los gastos derivados de todas las fases de producción realizadas en Finlandia. Por eso en Finlandia se están rodando más películas extranjeras.
«Recomiendo Finlandia también para rodar producciones extranjeras», dice Haapasalo. «Las personas que trabajan en la industria cinematográfica finlandesa tienen una buena formación y son grandes profesionales, se toman en serio las cuestiones de seguridad y se puede confiar en ellas. Me ha resultado muy fácil trabajar con ellos».
Por Päivi Brink, ThisisFINLAND Magazine 2023