El antojo supremo
El salmiakki, esa golosina sin la cual los finlandeses no pueden vivir, está hecho de regaliz sazonado con cloruro de amonio. Se vende también en las farmacias, ya que originalmente se usaba como medicamento para aliviar la tos. Existe incluso un aguardiente con sabor a regaliz salado. ¡Pero, ojo con el salmiakki, que si lo consumes en exceso te puede dar una subida de tensión!